Estreno en Latinoamérica de Secretos de pasión (There be dragons en el original), sobre la vida del creador del Opus Dei, Josemaríaescrivá de Balaguer.Curiosa trayectoria la de esta película. La propusieron dos supernumerarios del Opus Dei para evocar la figura deJosemaría Escrivá de Balaguer, se agregaron pequeñas compañías, un canal español y un fondo de riesgo que respaldó la financiación. La encaró un director agnóstico pero de marcada espiritualidad que, poniendo plata de su bolsillo, realizó sin mayores objeciones ni intromisiones una historia propia, y en vez de la esperada hagiografía expuso una historia más amplia.
Se hizo con gran despliegue, se estrenó en España hace prácticamente un año, en medio de fuego cruzado, bajo el título Encontrarás dragones, y se presenta ahora en la Argentina con media hora menos y un título más propio de telenovela de la tarde, que da lugar a confusiones.
El original en inglés es There be Dragons, alusión al “Hic suntdracones” que los cartógrafos de lejanos tiempos ponían en el borde de sus mapamundi, la “Terra Ignota” donde seguramente debía haber monstruos desconocidos. Sólo que, en este caso, la tierra ignota poblada de posibles monstruos está dentro de los mismos personajes. Se confronta la vida de dos amigos. Uno arrinconado en el rencor, el odio y la violencia, y otro que se decanta en la alegría, la tolerancia y el perdón. Pero que también es un ser humano. La historia transcurre durante la Guerra Civil Española, pero pudo ser cualquier otra. También pudo ser otro cura, y no Escrivá. Su nombre causó interés y escozor cuando el estreno en España. Aceptemos que no es un santo demasiado popular en su país.
Quizá por eso, Joffé decidió reformar la estructura de la obra, universalizar todavía un poco más la historia, y dejar al santo casi en cuarto término, detrás de otros personajes que, ellos sí, viven historias de pasión según lo que se entiende como tales en el cine. Pero las actitudes del cura entonces joven, su propuesta de paz y comprensión, su rechazo a la venganza, iluminan el conjunto, dan sentido a la experiencia que viven los demás personajes, y convierten a la película en algo distinto.
No se trata de otro relato “tendencioso” de buenos y malos sino una propuesta de entendimiento, una mano tendida de un sector a otro, aceptando que en una guerra nadie está del todo limpio, y que el adversario también puede tener su parte de nobleza y sus razones.
La versión completa ilustra episodios de infancia (“el santo nace en casa”, solían decir las viejas) y también algunas situaciones de particular interés que dan para el ejemplo o la polémica. Además otros personajes de interés para la historia, como (fugazmente) Isidoro Zorzano, ingeniero argentino que participó en los inicios del Opus Dei, y dio ejemplos de buen cristiano durante la guerra.
