Características y posibles soluciones al burnout es el tema de El cansancio de los buenos. La logoterapia con alternativa al desgaste profesional, de Roberto Almada (Buenos Aires, 2012, Ciudad Nueva).almada1Roberto Almada es médico psiquiatra y psicoterapeuta en la escuela de Viktor Frankl; además, cuenta con una licenciatura en Filosofía y una diplomatura en Ciencias Religiosas. Lo más importante, sin embargo, es su larga trayectoria en la atención de aquellos que han padecido lo que él llama “el cansancio de ser bueno”. ¿De qué se trata esto? Es el agotamiento o sindrome de burnout que caracteriza a aquellos que se dedican, por ejemplo, al voluntariado, la medicina, la docencia o las tareas sociales; también es frecuente entre miembros consagrados de instituciones eclesiales. No es sencillo para muchos lidiar con las frustraciones, las dificultades y las barreras que impone el contacto –y la vinculación afectiva– con las personas en situación de necesidad. Como tampoco resulta fácil, por otra parte, lidiar muchas veces con un ambiente de trabajo hostil, ya sea por la calidad misma del trabajo que debe realizarse como por las malas relaciones interpersonales. Estos factores producen un desgaste emocional y un estrés que aumenta con el tiempo. La persona corre el riesgo de terminar “quemada” por las exigencias que su tarea le impone, las cuales no se ven, muchas veces, reconocidas, valoradas ni recompensadas como se merece.

¿Se pueden combatir los signos del burnout? ¿Se puede recuperar la alegría por el trabajo, las ganas de comprometerse en aquello que un día fue una auténtica vocación? ¿Se puede mejorar el ambiente laboral y las relaciones interpersonales?

El cansancio de los buenos no se limita a enumerar los síntomas y características del burnout, que han sido ya ampliamente analizados por la literatura médica y la psicología. A la descripción del fenómeno, que nunca es abstracto sino enraizado en casos concretos, en hombres y mujeres “de carne y hueso”, el autor añade consejos sencillos de llevar a la práctica para reconocer el problema y buscar soluciones. Almada basa sus experiencias y orientaciones en la logoterapia, la escuela de psicología fundada por el psiquiatra vienés Viktor Frankl, que sostiene que el hombre puede encontrar siempre una razón para vivir, aún en medio de las circunstancias más dramáticas, gracias a su dimensión espiritual. Es esta dimensión, justamente, la que diferencia al hombre del resto de la creación; la que le brinda las herramientas que permiten superarse y dotar de sentido incluso las tareas más cotidianas.

Podemos concluir con la afirmación del autor, que compartimos, acerca de que “las personas buenas son necesarias”. Por eso se precisan las herramientas que, como este libro, ayuden a las personas honestas a “que la tierra siga siendo bonificada por ellas”. Porque ningún fruto bueno crece sin la acción indispensable de quienes donan su vida para ello.

2 Readers Commented

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  1. María Teresa Rearte on 10 agosto, 2012

    Lo bueno de Viktor Frankl, y por consiguiente de quienes le siguen, es que reconoce la dimensiòn espiritual del hombre. Y desde allí el trazado de un sentido de la vida.

    El problema que el libro trata es muy real. Y se da en diferentes ámbitos. Sobre todo en algunos relacionados con la evolución de las actividades en el mundo, como es el caso del nivel de tensiones y sobre-exigencia que, no pocas veces, comporta el desempeño en instituciones bancarias, financieras, etc. Tampién en las actuales condiciones de marginalidad y conflicto social, el desempeño docente en algunos lugares, con el desgaste inevitable para quienes se desempeñan en esas tareas. Y así sucesivamente podría mencionar otras tareas y roles.

    Es bueno que proponga cómo individualizar el problema. Y dé a la vez consejos sobre como abordarlo y superarlo.

    Comparto la apreciación de quien escribe la nota, en el sentido de que las personas buenas son necesarias. Pero, añado, también necesitan ayuda. E incluso necesitan que se les devele su «derecho» a vivir su propia y personal vida, sin subordinarla a su rol de ayuda o contención del otro. Lo cual puede ocurrir a veces en el cuidado del otro necesitado, enfermo, más débil, en la familia, por ej. Aunque también se puede contribuir a que quien dedica su vida a los demás, aprenda a darle y darse un marco adecuado de razonabilidad y amor por sí mismo. Porque el amor al prójimo no está reñido ni es incompatible con el amor a sí.

    No he leído la obra, pero de acuerdo a la presentación que se hace de la misma, me parece que puede ser de ayuda en las actuales condiciones de vida. Y en las características de la cultura actual.

    Gracias.

    Prof. María Teresa Rearte

  2. gaston on 8 febrero, 2013

    Buenos dias, quisiera ver si me pueden recomendar como actuar en mi caso.
    Trabajo hace 15 años en una Cia Multinacional, siempre con ecxelentes resutados, hace 2 años con la llegada de un nuevo Jefe comenzamos a tener muchas discusiones, y empece con ataque de panico lo cual derivo en un tratamiento psiquiatrico-psicologico. En una de dichas discusiones bastante violenta me descompense y me trasladaron en ambulancia a una clinica.
    Despues de este episodio parecio mejorar los tratos pero fue por corto tiempo y otra vez, hasta que porfin me cambian de jefe.
    Continuo en tratamiento, no soporto la presion laboral que antes me resultaba normal, hasta que en septiembre de este año tomo licencia psiquiatrica hasta la fecha, que me acabo de reincorporar, pero me doy cuenta que no estoy bien se que en cualquier momento me van a desvincular.
    Ademas de la indemnizacion por despido, tengo derecho a reclamar otro tipo de indemnizacion, por lo menos por lo que dure el tratamiento hasta que me encuentre nuevamente en condiciones normales???

    Gracias

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