EDITORIAL CLARETIANA lanzó dos nuevos libros de Sebastián Escudero

Enfrentando la tormenta. Resistir y confiar es la clave y Pan de héroes. Una colección de mensajes inspiradores son los dos nuevos títulos de Sebastián Escudero, predicador, músico, misionero, profesor y escritor católico.

Nacido en Córdoba, Sebastián Escudero ha realizado presentaciones en Inglaterra, Francia, Estados Unidos, México y casi toda Latinoamérica. Es profesor de Teología por el Instituto Católico Superior de Córdoba, profesión que ejerce dando clases en los institutos San Pablo Apóstol y en el mismo Instituto Católico Superior. Es miembro y asesor de los Misioneros Mensajeros de Jesús, con quienes ha llevado a cabo 50 misiones en distintos puntos de la Argentina.

 

En Enfrentando la tormenta comparte su testimonio personal: el descubrir que sólo confiando podemos vencer las crisis de nuestras vidas, y que si Dios permite un dolor es por un bien mayor. Su consejo es aprender a confiar en la bondad y la sabiduría del Señor, porque “existen tormentas que no tienen la costumbre de avisar cuando llegan a nuestras vidas, simplemente llegan y se plantan a la puerta de nuestro corazón para quitarnos la paz, la alegría y la felicidad. Vienen en forma de enfermedad, de crisis económicas, de crisis familiares, de muerte de seres queridos, de tentaciones oscuras”. Su libro insiste en que si logramos resistir y confiar, seremos transformados por el poder de Dios.

 

Por su parte, en el libro Pan de héroes, mediante ejemplos de relatos populares, películas y canciones contemporáneas así como anécdotas personales, citas bíblicas y otras fuentes cristianas, Escudero comunica mensajes de esperanza y de fe. La propuesta tiene que ver con que así como el Pueblo de Israel necesitaba el maná para poder sobrevivir en el desierto, nosotros necesitamos nuestro pan espiritual para vivir día a día.

Se trata de mensajes escritos para lectores de escuelas secundarias, pero pueden ser aprovechados por personas de todas las edades como un valioso aporte para lograr un espacio de oración tanto de forma personal como para meditar en grupo.